7.7.06

AGENTES INMOBILIARIOS DEL SER

La buena literatura es una especie de agente inmobiliario, pero uno que se dedica a enseñarte tu propia casa. Ahora pasamos a la salita pequeña de la chimenea del ala sur. Ahora entramos en la buhardilla de la torre del jardín. Aquí la sala de torturas. Aquí la piscina. Son lugares que no tenías ni puta idea de que existieran, y además en tu propia cabeza. Desgraciadamente, muchas veces son sitios que no querías conocer.

Un día vino Beckett y me invitó a dar una vuelta por el sótano. Cada vez que me acuerdo de lo que vi me dan escalofríos. Pero lo que más miedo me da es lo que no vi, la escalera que me señaló al final de la visita. Ésta baja más abajo, me dijo. Muchas gracias, cabronazo. Baja tú, si te apetece, no te jode. Me pregunto de cuántas cifras es tu comisión.

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